SOMOS POLO – SOMOS MOSCA
Esta es una invitación a la alegría.
Vamos a votar el próximo domingo por un nuevo Congreso. Nuevo en todo sentido. Démosle la espalda a las viejas figuras comprometidas en acciones criminales. Constituyamos un cuerpo colegiado del que podamos sentirnos orgullosos.
Necesitamos un país transparente, que hable un lenguaje distinto, que diga verdad, que sea generoso en el momento del cambio e implacable en el momento de la justicia. Un país que mire al Sur. Que se convierta en el líder que necesita América Latina. Un país que entienda que, frente al poder y al sistema perverso que nos gobierna, no hay colombianos adentro y colombianos afuera: todos estamos afuera.
El Congreso que elegiremos el domingo deberá ayudarnos a que en Colombia quepamos todos los colombianos. A que busquemos, unidos, un camino de dignidad para un país que, pese a sus adversidades, sigue siendo grande. Mi opción está en el Polo Democrático Alternativo. Junto a los seis millones de colombianos que hemos sido desplazados por la violencia y la injusticia, votaré por el número 402 de esa lista, que es una opción en la Cámara de Representantes por la circunscripción internacional.
Mi compromiso ha sido siempre el de participar activamente en la revolución de la conciencia que necesita Colombia. Con mi voto, refrendaré en las urnas ese compromiso. Vamos a ganar, pero si no ganamos no importa. Lo que importa es que hemos comenzado a avanzar por un camino distinto.
Creo que el derrotero político que ha seguido Colombia nos indica la necesidad de mirar hacia la izquierda. En las listas hay excelentes opciones. Quien vote en el exterior podrá hacerlo por Senado y Parlamento Andino. Para el Senado, pienso en Gloria Inés Ramírez, en Jorge Enrique Robledo, en Gloria Cuartas, en Alberto Chavarro. Para el Parlamento Andino, en Fabiola Piñacué o en Raul Arroyave. Quienes voten en Colombia no podrán hacerlo por las listas que representen a los nacionales en el exterior, pero tendrán la posibilidad de pensar en Carlos Lozano, en Iván Cepeda o en Germán Reyes.
El domingo iniciaremos la marcha hacia el país que queremos. Le diremos no a la violencia, no al terrorismo de Estado, no a los eternos protagonistas del oprobio. Le diremos sí a la democracia, sí a un esquema que nos lleve a la justicia social y económica, sí al compromiso con las profundas y verdaderas causas populares.
Participemos en las elecciones con la seguridad de que, con base en nuestro voto, doscientos años después de su “independencia”, Colombia dará un paso más hacia la búsqueda de su verdadera independencia.
Fernando Garavito